El mundo de Lumy

El mundo de Lumy, el conejito de luz, es hermoso. Lumy mira las cosas con sus ojos-soles y las ilumina con su luz, con su bondad y su verdad.

Nuestro conejito saluda cada día con ilusión y curiosidad. ¿Qué aventuras le aguardan? Lumy habla con las flores, con los pájaros y la pequeña gente que vive cerca de él. Salta, corre, juega, se ríe con su risa de cascabeles de plata, y lo hace con alegría y amor a la vida. Todo a su alrededor resplandece con su luz.

Lumy es capaz de ver lo invisible y leer los mensajes que le trae el viento. Nuestro conejito de luz ama la Naturaleza y la cuida bien. Piensa que la vida está hecha de pequeñas cosas y por eso son importantes.

En el mundo de Lumy está la niña Olga. Se quieren. El conejito de luz enseña a la niña Olga a mirar mejor, a escuchar de verdad, a conocer mejor el mundo en que vivimos y a hacer las cosas con amor, como recoger las flores para alguien o limpiar un arroyo, sabiendo que lo que haces es importante para otra gente. Le ayuda a conocerse a si misma y comprender que lo que hacemos a su vez nos va haciendo a nosotros.

Desde luego, el mundo de Lumy tiene otro color, una luz especial. Es un mundo lleno de bondad, verdad y belleza. En él, los descubrimientos son continuos. Lumy comparte su mundo con la niña Olga y le enseña a vivir con ilusión y amor, amando la vida.